domingo

Sweet


Su piel parece de color ébano, lisa y delicada. Su pelo corto no teme ensuciarse. Parece pertener a esa playa tumbado allí, con los brazos estirados, dueño de la arena y de todo. Él, sonriendo, la atra hacia sí, dueño también de ella, acogiéndola con un beso más largo y más intenso. La abraza manteniéndola pegada a él, respirando su sabor dulce. Ella se deja llevar arrebatada por aquella fuerza, y en ese momento entiende que no había besado nunca a nadie de verdad...

2 comentarios:

  1. Está geniaal :)
    Pásate por el mío http://ycontantoycontanpoco.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. SIN DUDA TE SIGO.
    Felicidades por tu blog, me encanta :)

    ResponderEliminar